Autor: Jeff Kinney 💖😛
Editorial: RBA
Resumen: La familia Heffley decidieron realizar un viaje que recordarán durante toda su vida.
Greg no quería ir, pero su madre no le dejaba quedarse en casa.
Era la hora de preparar el viaje y se produjo el primer problema: todas las maletas y equipamiento no cabían en el coche.
Tras este problema, un día después el padre de Greg decide utilizar su antigua lancha motora como remolque, de forma que ya cabían todas las cosas.
En el viaje todos iban muy cómodos excepto Greg, que tenía que ir en la parte trasera amontonado con parte del equipaje.
Durante el viaje, Greg tuvo que aguantar los berrinches de su hermano, una merienda "sana" creada por su madre, juegos estúpidos...
Por la noche los Heffley decidieron descansar en un motel. Mientras aparcaban, decidieron que para cenar Rodrick comprara comida en un supermercado. Lo que no sabían es que Rodrick compraría cosas de su estilo: chicles, pizzas congeladas, snacks, comida en bolsas, etc.
Además de cenar esas porquerías, el motel era asqueroso: paredes roñosas, mantas rotas, un sola cama, etc. Lo más doloroso es que no había devoluciones.
La única cama que había la ocupo Manny, porque se quedó dormido y despertarlo armaría un escándalo.
A las tantas de la mañana, Greg se despertó porque oyó un estruendo. Salió y se trataba de tres niños descontrolados que estaban jugando con una mesilla. Greg les echó una bronca y el más pequeño de los tres empezó a llorar.
Lo peor llegó a continuación: fueron a buscar a su padre, un hombre bastante fuerte y bestia. Greg corrió y se metió en la habitación. El señor acompañado de sus hijos llamó a la puerta, pero no a la de los Heffley, sino a la de al lado. Les recibió una señora, y como tal esta contestó que no sabía nada de lo ocurrido. El barbudo, que era como llamaba Greg al señor, volvió a su habitación, ya que era muy tarde y todos tenían sueño.
Al día siguiente los Heffley salieron del motel y continuaron su viaje.
Todavía les esperaban muchas más cosas como una feria alocada, un cerdito descontrolado, unas gaviotas enloquecidas, etc.
Pero lo que si sabemos es que el señor barbudo y su familia seguirán el rastro de Greg...
Opinión: Me ha encantado (como todos los Diarios de Greg) y he pasado mucho ratos divertdísimo leyendo el libro.
Además es uno de los que más me a gustado, teniendo en cuenta que me le he devorado en apenas unas horas.
Valoración: *****
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